Bajo la premisa de “convertir Málaga y España en el epicentro de la literatura de habla hispana” nace el Festival “Escribidores”, el primer festival Literario de América Latina y Europa que, organizado por la Cátedra Vargas Llosa y el Centro de Cultura Contemporánea de Málaga La Térmica, verá la luz del 25 al 30 de octubre.

“Nuestra idea con este festival es convertir Málaga en una bisagra literaria entre América Latina y Europa por su ubicación geográfica y también por ser una ciudad cultural; es el lugar perfecto para que se encuentren distintas tradiciones literarias”, ha dicho esta mañana durante la presentación del festival el director de la Cátedra Vargas Llosa, Raúl Tola.

El Instituto Cervantes ha acogido la presentación de la primera edición del festival, que con Perú como país invitado nace respondiendo a dos objetivos: convertir Málaga en un “puente literario” y “contribuir al hermanamiento entre América Latina y España”, ha destacado Tola, que vaticina “un diálogo cultural de imprevisibles pero muy felices consecuencias”.

 “Hay muchos festivales que apuntan en la dirección del lenguaje hispano, pero nunca suficientes, se trata de uno de los grandes idiomas vehiculares del mundo que debemos impulsar”, ha destacado Tola sobre el festival, cuya idea se vertebró “en los días más oscuros de la pandemia” para contar con el apoyo “inmediato” de la Térmica de Málaga.

Durante la presentación y mediante una intervención por video, el Ministro de Cultura de Perú, Alejandro Neyra Sánchez, ha resaltado que “Perú perseguirá el objetivo de ser un puente entre culturas y lenguas” mediante la literatura, “una forma de construir mejores ciudadanos”.

Jorge Eduardo Benavides, director del festival, ha aseverado que  “Escribidores” surge con el fin de elaborar una  “nueva lectura de nuestra sociedad” a través de un programa que se retransmitirá en “streaming” y que contará con mesas, encuentros online, talleres, conciertos de música y hasta charlas distendidas de autores en la cocina mientras elaboran platos típicos de su país.

Además de contar con diferentes iniciativas entre las que también se dedica un hueco a “contactar con lectores jóvenes”, el festival otorgará el “Premio Escribidores”, que en esta primera edición homenajea al escritor peruano Alfredo Bryce Echenique, autor de obras como “Un mundo para Julius” o “No me esperen en abril”.

“Buscamos construir un diálogo y acercarlo a los lectores”, ha remarcado Benavides sobre los diferentes temas que abordará el festival, que van desde la presente crisis sanitaria en la mesa “Enmascarados y en mascarillas” hasta “el vínculo entre la literatura y la política o el compromiso social, las nuevas tecnologías, la inmigración o la censura y la autocensura”.

Temas quem según ha apuntado la ensayista y crítica literaria Mercedes Monmany, son “muy importantes en nuestra época” e “influyen directamente en el mundo que nos rodea”, por lo que destaca es importante y reseñable “el dinamismo y la profundidad con la que el Festival Escribidores los plantea”.

La lectura es para la escritora Esther Bendhan “un pasaporte para abrirnos a otros países y descubrirnos”, ha señalado la autora, que encuentra en el festival la oportunidad de unión y puesta en común entre “distintos escritores con una gran distancia física y también editorial”.

“Málaga es un lugar de movimiento y de encuentro por los cruces culturales que supone su ubicación en el Mediterráneo, no solo a nivel metafórico por el mar, sino además por el esfuerzo que la ciudad realiza desde hace años para ser un punto cultural”.

El proyecto, que llega a la ciudad del 25 al 30 de octubre de 2021, prepara así una primera edición con vistas a la continuidad anual, en palabras de su director Jorge Eduardo Benavides, que según adelanta ya cuenta con candidaturas de países invitados para próximas ediciones.

EFE